Por unas fiestas libres de discriminación

El Grupo de SOMOS en Huesca, por tercer año consecutivo, insta a la ciudadanía oscense a educarnos mutuamente.  

Al más puro estilo ultra, muchos 9 de agosto, en el apogeo previo al lanzamiento del chupinazo, muchas personas nos incomodamos y nos sentimos inseguras en la Plaza de la Catedral oscense cuando comenzamos a escuchar como una masa enfervorecida comienza a gritar cánticos homófobos, afirma Loren González, responsable de la ONG en Huesca. ¿Se imaginan que gritaran «es negrata quien no bote» o «no es no hasta que lo diga yo»? No, obviamente no; lo que sucede con la LGTBIfobia es que, en este caso, el insulto más utilizado en España para despreciar a alguien, sobre todo para minusvalorar a un hombre, es el de ¡maricón! y está totalmente normalizado, por lo que muchas personas ni lo perciben como un insulto argumenta en la misma línea Juan Diego Ramos, presidente de SOMOS.  

Las palabras tienen significado y hay expresiones que incitan al menosprecio y que por desgracia están incluidas en algunos cánticos de fiestas, no sólo en las de nuestra ciudad, por desgracia. 

«Como es lo que siempre se ha dicho, lo perdonamos» ya no es un argumento válido, recuerda González, porque lo que es homofóbico, bifóbico, transfóbico o discriminatorio lo ha sido y lo sigue siendo; sencillamente tengamos en cuenta cuántas cosas son o han sido tradición y abominación a la vez, concluye.  

Desde SOMOS hacen hincapié en que el papel protagonista en las fiestas lo tiene la ciudad y sus gentes, por lo que animan a disfrutar las fiestas, vivir la ciudad y respetar la diversidad al mismo tiempo.

¡Felices fiestas!